Ahora piensas en los días, todos los años llega septiembre, qué día de la semana es para ti? no encuentras respuestas, lo seguro es que todos los años llegue septiembre y tengas un subidón y bajón instantáneo de emociones, se vuelve predecible pasar del éxtasi eufórico al bajón ensimismado de la frustración.
Ya vendrá Octubre, te consuelas, es miércoles tienes energía, motivación y ganas de seguir, usemos un disfraz, juguemos a ser otro, juguemos a ser.
Luego Noviembre, sobrevalorado como los viernes. Claro la semana laboral o escolar acaba y qué? por eso vamos a celebrar? bueno un día menos en el que hago cosas que no me gustan. Comienza un receso, la vida es eso que pasa mientras estás enferma.
Por supuesto, diciembre no se queda atrás, tiempo familiar, charlas para pasar el rato, rememorar que no hiciste nada durante la semana, recuerda por lo menos no saliste tan maltratada.
Y llega Enero es un lunes extenso, normalmente me quejaría por continuar con la rutina pero no, este mes este día es el comienzo, hay expectativas, esperanzas, tienes ganas de vivir. Madrugas ves el amanecer y te imaginas los olores dulces del colorido atardecer.
Febrero - marzo - abril - mayo Un extenso martes. Todo lo que esperas no va a pasar, sigues valiendo verga.
Junio y Julio un jueves que llega rápido y así se va, logras arreglar el error, limpiar la mierda para continuar.
Agosto es un bonito sábado con sus atardeceres y viento, te elevas llegando al punto de inflexión donde recuerdas la proximidad de la caída...
Son las 9 pm, tos, amigdalitis, encías sangrantes - pronto caerán los dientes- y conjuntivitis. Hoy soy una sustancia desagradablemente apestosa.
